Un perro, como nosotros, también necesita bañarse en invierno, no es sólo una necesidad que tenga que ver con la primavera y el verano sino que, al menos una vez al mes, es necesario bañar a los perros, si bien es cierto que, cuando es en época más fría, como otoño e invierno, hay que procurar un poco más de precaución para que no se vaya a resfriar y no se ponga malo.
Lo primero que has de tener en cuenta es que, si en el verano lo bañabas fuera, al sol, en invierno tendrás que bañarlo dentro de casa, en una bañera o ducha, en un lugar donde lo puedas tener controlado y esté cómodo. Además hay que intentar que haya una temperatura constante y que el agua que uses no esté fria del todo, más bien templada (tirando a fria) para que así no se resienta tanto del frio.
Una vez bañado del todo hay que secarle el pelo. Esto puede provocar un problema porque hay perros que no soportan el sonido de un secador, así que hay que acostumbrarlo. Primero sécalo todo lo que puedas con una toalla y, después, intenta mantenerlo tranquilo mientras le pones el secador para secarle el pelo (no demasiado cerca porque le puedes quemar el pelo).
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